Cambia tu mundo por mi y lo sacudiré
Peter
Había pasado mucho tiempo desde que dejamos el hotel y estaba empezando a preocuparme por Lali. Mi mente corría mientras consideraba todas las posibilidades.
Tal vez mi madre no había llegado con lo que prometió y Lali se metió en problemas cuando llegó a casa. No quería llamarla o mandarle un mensaje en caso de que siguiera hablando con su mamá, pero mi miedo y preocupación amenazaban con tomar las riendas.
Tomé mi teléfono y consideré llamar, luego lo bajé de nuevo. Esto era ridículo. Ella no estaba en peligro y ella llamaría cuando pudiera.
Mi teléfono sonó y contesté de inmediato.
—Dios, he estado esperando por siempre. ¿Está todo bien?
—Sí, todo está bien. Necesitaba ver a Euge antes de ir a casa así que corrí a la suya por un minuto. Lo siento. Supongo que me quedé más tiempo del que creí.
—Está bien. Así que, ¿cómo fue cuando llegaste a casa? Era como si mi mamá fuera alguien más. La calma antes de la tormenta sería la descripción perfecta.
—Raro, así es como fue. Mi madre actuó como si todo estuviera bien. Dijo que quiere que te invite así ella y papá pueden conocerte. Fue como si todo el incidente del ascensor nunca pasó.
—¿Qué crees que le dijo mi mamá? Para mí, esto sólo podía ser acerca de una cosa.
—Creo que ella sabe sobre la aventura de mi mamá con David y la está chantajeando para dejarnos estar juntos.
—¿Por qué mi mamá le haría eso a su amiga?
Él nunca vería esto como lo que era.
—Creo que Gime está haciendo esto así puede verte feliz y esta es la única manera en que tiene algún control sobre ello.
—Espero que no esté haciéndolo porque cree que va a cambiar la manera en que me siento por ella. Me importaba muy poco por qué lo estaba haciendo.
—¿Importa el por qué si esto significa que estaremos juntos?
—Nada importa, siempre y cuando te tenga. A ti y a nadie más.
Estar con Lali en su casa con sus padres era extraño. Era recibido, sin embargo no lo era. Su madre era cortés exteriormente, pero al mismo tiempo fría y supuse que su padre probablemente estaba confundido sobre por qué su mujer apoyaba la decisión de Lali de salir con alguien como yo. La cena con los Espositos fue tensa por decir lo menos, y estaban menos que impresionados por mis planes de asistir a una universidad comunitaria y luego aplicar a la academia de policía. Ambos tenían esta increíble manera de hacerme sentir inferior sin una palabra o una mirada en mi dirección.
Cuando la cena terminó, Lali y yo fuimos al patio y nos sentamos junto a la piscina para colgar nuestros pies en el agua. Fue un gran alivio alejarme de sus padres, pero la sensación de inferioridad que me infundieron permaneció y mi falta de conversación no pasó desapercibida para mi chica.
—Has estado muy callado esta noche. ¿Qué está mal?
Cuando jodías chicas sin una relación, no tenías que hacer toda la cosa de «conocer a los padres», así que esta era la primera vez para mí. Sus padres dirigiendo su desdén hacia mí no fue un secreto, y supuse que me preocupaba en el fondo de mi mente que eventualmente Lali los escucharía.
—Son tus padres. Puede que no lo dijeran, pero no les gusto y seguro no me quieren saliendo contigo.
—Siento que fueran tan groseros. Sabía que serían así y por eso no quería que los conocieras. Nunca tuvo nada que ver contigo.
—No es tu culpa que no satisfaga las expectativas del novio de su
hija.
—Por favor, no digas eso. No podría estar con nadie más perfecto para mí.
No podía evitar la razón por la que vine, pero podía controlar a dónde iba y ver cuán poco impresionados estuvieron con mi elección de carrera sacudió mi centro.
Me pregunté si Lali estaba tan poco impresionada como sus padres.
—Nunca le he dado a mi elección de carrera ningún pensamiento que no fuese que es lo quería hacer con mi vida, pero estar contigo me hace pensar en más que mí mismo. ¿Cómo te sientes sobre mí siendo un policía?
Agarró mi mano.
—Bromeo sobre cuán caliente te verías en uniforme, pero la verdad es que no me encanta la idea de que estés en peligro cada vez que vas a trabajar. Me asusta.
Moví mis pies sobre los de Lali y jugueteé con ella bajo el agua.
—Convertirse en un oficial está a unos años en el camino, pero necesito preguntarte algo. Si aún estuviéramos juntos en un par de años, ¿podrías verte estando con un policía?
¡Oh, demonios! ¿De dónde vino eso? Deslizó su pie alrededor de mi tobillo y lo acarició de arriba abajo.
—Sí, podría veme saliendo con un policía.
No me refería a salir y respiré hondo mientras me preparaba para hacer la pregunta que podría hacer o romper esta relación.
—Tendré un ingreso decente como policía, pero nunca sería capaz de darte las cosas lujosas que tus padres tienen, así que voy a ir directo al grano aquí. ¿Podrías ser feliz estando casada con un policía?
Rápidamente se giró hacia mí porque ella necesitaba ver si estaba bromeando. Cuando sus ojos se encontraron con los míos no descubrió humor y reconocí el asombro en los suyos.
—Hablas en serio.
Bueno, bueno. Los papeles se habían invertido. Era yo quien sorprendía a Lali Esposito y aún no había terminado.
—Tan en serio como un ataque al corazón. Si me dijeras que no podrías estar casada con un oficial de policía y quisieras que hiciera algo diferente, lo haría. Sería lo que tú necesitaras.
Su pie cayó del mío y no tenía respuesta. Ni una palabra. Eso no podía ser bueno. Básicamente acababa de decirle que quería casarme con ella algún día en no muchas palabras y que cambiaría mi carrera si eso iba a impedirle ser mi esposa. Fui el primero en apartar la mirada porque mi valentía fue sustituida muy pronto por la vergüenza. Ese fue un movimiento estúpido de mi parte. ¿En qué estaba pensando? Las chicas como ella no iban voluntariamente de vivir en el lujo a la clase media como mucho. Sacó los pies del agua y se puso de pie.
—Ven conmigo.
Saqué mis pies del agua y me paré para seguirla hasta la casa de la piscina. Abrió la puerta y entramos al interior sin encender la luz. Después de cerrar la puerta, la tenue luz de la luna era la única iluminación en la habitación mientras ella me alcanzaba en la oscuridad. Sus labios no necesitaron luz para encontrar los míos, pero cuando lo hicieron, flotaron sin besarme.
—La única persona que necesito que seas, eres tú. Si ser tú significa que seas un policía, entonces estaría orgullosa de ser la esposa de un oficial.
Chupó suavemente mi labio inferior y lo dejó ir por lo que hizo un fuerte ruido antes de que se moviera a mi cuello. ¿Cómo podía hacer eso? Sólo un tirón de mi labio con su boca y podía poner débil mis rodillas.
—Tus padres están justo ahí. Puedo verlos a través de la ventana. ¿Y si nos atrapan?
—Podemos verlos pero ellos no pueden. Además, ya no les gustas así que, ¿cómo vamos a empeorarlo excepto frustrándolos más?
—Tiró mis manos y me llevó hasta una silla—. Siéntate. —Hice lo que me dijo y luego se sentó en mi regazo—. Acabas de decirme que cambiarías tu mundo para hacerme feliz, así que creo que mereces que te sacudan el mundo, ¿no lo crees?
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chicas estoy aquí de vuelta y no es un sueño ojala me sigan leyendo y sigan igual de fieles como siempre, en cuanto a la novela le quedan menos de 10 capítulos así que la terminare de forma rápida y seguire subiendo novelas que las enamoran y pondrán cachondas .
y lo que sucedió fue que mi compu no prendió mas y perdí toda la información ya logre recuperarla por suerte bueno eso y ojala me sigan en este camino por que hay mas,
